Entorno al sexo anal hay muchos tabús que hay que dejar de lado para disfrutar de una práctica sexual que puede resultar muy estimulante y placentera para ambos, el sexo anal no es más que una forma más de disfrute sexual, una experiencia diferente que permite vivir nuevas sensaciones muy placenteras.

4 Pasos para disfrutar del Sexo Anal

El ano es muy sensible y por lo tanto eróticamente muy interesante de estimular, pero ¿Cómo debemos realizar el sexo anal para que ambos disfrutemos de él? Siguiendo estos 4 sencillos pasos conseguirás un encuentro placentero para ambos.

1. Relajate: si nos ponemos tensos contraeremos los músculos anales y por lo tanto la penetración va a resultar dolorosa, es muy importante relajarse. Si te asusta el dolor hay productos especiales para ayudar a relajar el ano (lubricantes con relajante, insensibiliadores…) en las primeras experiencias anales puedes valerte de alguno de estos productos para ir aprendiendo a relajar el ano. En el momento que aprendas a relajar el ano te darás cuenta de que no es una experiencia para nada dolorosa. Para aprender a relajar el ano son muy interesantes los Plugs anales, puedes jugar con ellos e ir aprendiendo a evitar la contracción anal, disfrutando de las sensaciones.

2.La higiene: Al igual que en el sexo vaginal en el sexo anal hay que tomar ciertas medidas higiénicas, para l sexo anal es recomendable, aunque no obligatorio, utilizar enemas o duchas anales.

3.Lubricante: La vagina tiene lubricación propia pero el ano no la tiene, por eso es fundamental utilizar lubricante en las relaciones sexuales anales. De esta forma facilitamos la penetración y evitamos producir heridas e irritaciones. Los lubricantes de base agua o base silicona serían los más recomendados.

4.Estimulación previa: Del mimo modo que la penetración vaginal la penetración anal puede resultar dolorosa sin juegos previos. Estimulando previamente el ano ayudamos a la relajación y a su dilatación. Podemos utilizar algún juguete erótico, especialmente diseñado para estimulación anal, o simplemente utilizar los dedos.